Sitios donde perder el tiempo

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Quisiera dedicar este premio a mi perro...

...que nunca tuvo relación con este blog, pero quién sabe si lo hubiera empezado de no haber existido él.

También dedico este post a las orquestas y músicos que componen para grandes artistas y ganan una décima parte que la persona que sale en pantalla.

Y aquellos técnicos y trabajadores sin los cuales las grandes películas no serían posibles pero cuyos nombres sólo salen en los títulos de crédito, cuando salen.

Me pregunto en qué momento se inventó el concepto de mérito y quién tuvo la genialísima idea de que para cada cosa este pertenecía a una única persona. ¿Cuándo empezaron a darse premios a cambio de logros, incluso si éstos no aportaban nada?

No es de extrañar que ahora, con tal de aparecer en el libro Guinness, haya personas que se jueguen la vida haciendo cosas sin sentido o dediquen la mitad de su tiempo a perfeccionar una habilidad totalmente inútil. No es de extrañar ya que luego lo premiamos. ¡Enhorabuena, es usted la persona que más tiempo puede permanecer a la pata coja el segundo martes de noviembre subido en un Boeing 747 que viaja a exactamente 822 kilómetros por hora en la ruta Madrid-Londres, de aquí en adelante su cara saldrá en los libros, forma parte de la historia de la humanidad!

Y tan contentos, oiga.

Como diría Mourinho: Yo no lo entiendo. Y por múltiples motivos.

Primero de todo porque ser el que más corre del mundo -durante una distancia específica- no afecta a nada. Bien, corres mucho, genial.

Y segundo porque el mérito nunca es de una única persona. Hubo un sinfín de variables que ocurrieron a lo largo de la vida de Newton y una incontable cantidad de personas que influyeron, sin los cuales él no habría planteado las leyes de la gravedad, así que podemos afirmar que esas personas eran vitales para tal descubrimiento y tienen tanto mérito como él. Pero más aún, para que cada una de esas personas y sucesos influyeran en Newton, hubo otro grupo de personas y sucesos distintos sin los cuales esa influencia no habría ocurrido. Y ya podéis entender mi razonamiento.

Por hacer una analogía tonta, hay muchos juegos online en los que se cuenta el número de asesinatos que se producen, siendo así que si juegan equipos de muchos jugadores, el asesinato siempre cuenta para aquel que dio el último golpe. A lo mejor antes que él sus compañeros han llevado a cabo una excelente estrategia y han dañado al enemigo, y el jugador que da el último golpe sólo ha hecho eso y nada más. Pero el mérito, se lo lleva él.

No es muy distinto con cualquier otra cosa en la vida, Steve Jobs nunca hubiera sido nadie si otras personas antes no hubieran hecho ciertos estudios sobre la electricidad, la electrónica y la transmisión de ondas, por poner algunos ejemplos.

Al final, de alguna manera, todos somos influyentes en cada uno de los sucesos que ocurren a nuestro alrededor -y, por efecto mariposa, en todo el mundo-, por ello el deseo tan extendido de llegar a ser alguna vez alguien relevante para la humanidad carece totalmente de sentido, pues todo lo que hacemos afecta al futuro de la humanidad.

Y siempre es divertido pensar que tal vez, por culpa tuya, estallará la tercera guerra mundial.

P.D.: Casi me olvido de comentar que esto funciona en las dos direcciones, nunca hay una única persona culpable de un suceso negativo, uno nunca es realmente responsable de las cosas que hace.

1 comentario:

Tienes una pistola en la cabeza.